Las marcas registradas FSC son la principal herramienta de comunicación para que los titulares de certificados FSC demuestren que sus productos cumplen con los estándares establecidos por FSC. Por lo tanto, es esencial que se usen correctamente, no engañen a los clientes y al público acerca de los reclamos de certificación y no estén asociados con aspectos de calidad más allá de los cubiertos por la certificación FSC.